'LAS CHICAS GILMORE': El encanto de la vida cotidiana

Como La Estantería ya llevo más de un año de funcionamiento, ya me empieza a pasar aquello de no saber si ya he hablado antes de una cosa u otra, pero como no me suena haberle dedicado un post entero a la serie LAS CHICAS GILMORE, creo que hoy es el día, el momento y la ocasión para hacerlo. 

No tengo mucha gente en común que siga esta serie; al menos, en este momento. La razón es que acabó de emitirse hace unos tres años en la 2, aunque también se emite el canal Cosmopolitan desde hace tiempo como es el caso de 'Sexo en Nueva York'. El tema es que, aunque sí que hay mucha gente que la ha visto, no es una de las series de moda ahora mismo ni entra en el estereotipo de producción televisiva que mueve masas, aparte de que el mundo de las series va tan rápido como el de las nuevas tecnologías, que si no te mueves rápido y te subes al carro, te quedas obsoleto y no estás en la onda.

"... con las series, 

no me gusta estar 

en la onda"

Pero a mi, con las series, no me gusta estar en la onda. Y no porque vaya de esnob, friki, intelectual ni nada por el estilo. Simplemente es que me agobia el simple hecho de tener la obligación de ver todas las series que se nos pongan por delante solo por el mero hecho de que es el nuevo tema de conversación de la gente en este momento. A mi me suelen gustar las series sencillas, que me hacen reír, a veces llorar y, sobre todo, que me hacen desconectar de la estresante vida diaria. Así de simple. Y 'Las chicas Gilmore', al igual que tantas otras, lo consigue. 

¿Por qué me gusta esta serie? Pues lo esquematizaré para que no os aburráis con mis peculiares monólogos. 

-Me encantan sus personajes: son entrañables, cercanos y muy humanos. Principalmente, el de Lorelai Gilmore, la madre. 

-Como he mencionado anteriormente, me hace reír y también llorar.

-Me gusta como retrata la sencilla vida en un pequeño pueblo de Connecticut.

-El tipo de relación que tienen madre e hija me entusiasma.

-Los diálogos rápidos ingeniosos de la protagonista.

-La evolución de la hija, que la vamos viendo crecer como persona a lo largo de cada temporada.

-Y especialmente me llama la atención que sea diferente, pausada, lenta... pero que, al mismo tiempo, no aburra sino todo lo contrario; la trama siempre tiene interés, el de seguir la vida de una madre soltera que tuvo a su hija a los 16 años, de la relación con su hija y, a su vez, de la relación de ésta con sus vecinos, los chicos, los compañeros del colegio, los estudios, etcétera. 

EN DEFINITIVA, CREO QUE 'LAS CHICAS GILMORE' TIENE EL ENCANTO DE LA VIDA DE LA VIDA COTIDIANA. 

Si os gustan este tipo de series, os la recomiendo encarecidamente. Y por cierto, no me contéis nada ¡¡que aún voy por la cuarta temporada!!

¡Hasta la próxima, estanteros!