martes, 27 de marzo de 2012

'BLANCANIEVES (MIRROR, MIRROR)'. Riámonos de los cuentos.

Cómo disfruté viendo 'Blancanieves (Mirror, mirror)'. ¡Qué divertida, cuánto me reí, qué simpática resulta la Roberts de mala malísima, y un largo etcétera de exclamaciones...!

Y es que... seamos francos... últimamente Hollywood anda escasito de ideas. Y con el "érase una vez" no nos garantizaba que esta peli fuera a ser ni buena ni nada del otro mundo. Y siendo sinceros, ¡no lo es! Ni buena ni nada del otro mundo. Pero en lugar de ceñirse a adaptar un cuento más, en este film, su director y guionista han optado por darle un aire de autoparodia, más humorístico, de carcajada, y sobre todo, adaptándolo a los nuevos tiempos, donde ni los niños son tan inocentes ni las damiselas en apuros siguen dispuestas a esperar a que llegue su príncipe azul a salvarlas, sino que llevan ellas las riendas luchando espada en mano, e incluso despertando a su caballero andante de un hechizo maligno con un beso de amor. 

"El director y guionista han optado 
por darle un aire de autoparodia, 
más humorístico, de carcajada, 
y sobre todo, adaptándolo 
a los nuevos tiempos"


Si tenemos que añadir algún ingrediente a este explosivo cóctel que forma lo que es un cuento de hadas del siglo XXI, están los entrañables enanitos, que en lugar de tener nombres tan melosos como: Gruñón, Mudito o Bondadoso, aquí los cambian por apodos tan contundentes como: Risitas, Napoleón, Mandamás o Media Pinta, entre otras socarronas denominaciones. Y aparte de ello, son ladronzuelos de poca monta marginados por la sociedad, aunque eso sí, tienen algo en común con los que Disney nos encandiló: tienen un gran corazón y una debilidad con nombre de mujer: Blancanieves. 

"La película cuenta con una estética 
muy cuidada, que roza la exageración tanto 
en su vestuario como en sus decorados"

La película 'Blancanieves (Mirror, mirror)' no sólo es entretenida. También cuenta con una estética muy cuidada, que roza la exageración tanto en su vestuario como en sus decorados, algo que le aporta otro toque de distinción y personalidad. Y hablando de la vestimenta de sus actores, no podía dejar de mencionar dos curiosidades: una, el primer traje que luce Blancanieves, que recuerda considerablemente a la típica tela de un traje de fallera, es decir, la indumentaria típica valenciana. Pero no es esto lo único que le da un toque de 'la terreta' al film. Más chocante aún resulta que el apuesto príncipe, interpretado por Armie Hammer (visto en la serie 'Gossip Girl' y en la peli 'La red social'), sea de Valencia. Sí, lo habéis leído. ¡De Valencia! No entendemos por qué hay tantos toques valencianos en la peli, y sinceramente, nos gustaría saberlo. Así que invito a aquellos frikis que se enteran de todos los entresijos del séptimo arte, que por favor, nos digan a qué se debe tanto valencianismo en Blancanieves, que por cierto, como valenciana de pura cepa que soy, me parece 'la mar de bien'.  

"El personaje de Julia Roberts recuerda 
a la grotesca Reina Roja de 'Alicia en el País 
de la Maravillas' de Tim Burton"

Tengo que volver a mencionar a la Novia de América, Julia Roberts, que aunque no nos la imaginaríamos nunca en el papel de villana, aquí es una reina muy pero que muy mala; y además, nos encanta, hasta el punto de que nos gustaría volver a verla así de malvada en alguna película más. Y es que su personaje nos recuerda (al menos a mi) a la grotesca Reina de Corazones de 'Alicia en el País de la Maravillas' de Burton, maravillosamente interpretada por Helena Bonham-Carter; es decir, una mandamás sin escrúpulos, que tiene todo un séquito de incondicionales súbditos a los que maltrata, con una adoración extenuante hacia si misma, pero con una inseguridad implícita que le hace actuar siempre en contra de los intereses del pueblo. Todo ello, claro está, en un tono satírico y totalmente ajeno a la realidad, con el maniqueísmo propio de un cuento de hadas. 

Tendremos que esperar al 1 de junio para ver la otra Blancanieves que se ha rodado este año: 'Blancanieves y la leyenda del cazador', con la crepusculina Kristen Stewart y la bellísima Charlize Theron

Nos convence la hija de Phil Collins, Lily Collins, en el papel de Blancanieves, aunque aún le quede mucho por aprender en el mundo de la interpretación. Y nos fascina, aunque en un principio nos deje desconcertados, la canción de la película, 'I believe', totalmente Bollywoodiana (es decir, que no pega ni con cola con un cuento de estas características), pero que le da una explosión de color, alegría y ambiente festivo digno de un final de cuento... ¡Y fueron felices, y comieron perdices!

¡Hasta la próxima, estanteros!

Escena de la película



miércoles, 21 de marzo de 2012

UNA COMEDIA EXQUISITA

Últimamente se estaba haciendo cada vez más habitual que pasaran 20 días entre post y post, pero sé que a partir de ahora voy a tener más tiempo para volver a escribir con la misma asiduidad con la que lo hacía antes. 

Dando un repaso a las películas que he visto últimamente, me he dado cuenta que en febrero vi WAR HORSE y no la comenté, pero como ya está archi nombrada por los críticos porque lleva mucho tiempo en cartel, la dejaré sin crítica y me centraré sólo en el último film que he visto. Eso sí, diré que me gustó; es agradable, pastelón y con animalito bonito como prota. Pero vamos, que tampoco es 'el no va más'. 

Antes de centrarme en la peli que os quería comentar también mencionaré que vi ESTO ES LA GUERRA, la protagonizada por la rubísima Reese Whiterspoon, una producción que mezcla acción y comedia romántica (un subgénero híbrido muy habitual en los últimos años) con algo más de encanto que el que promete su trailer, entretenida y sin más pretensiones que el hacer pasar un buen rato.

Y ahora sí... Por fin me puedo centrar en lo que verdaderamente me motiva: comentar la maravillosa película INTOCABLE, una comedia francesa con un trasfondo dramático, ya que el protagonista, Françoise Cluzet (Pequeñas mentiras sin importancia), encarna a un tetrapléjico adinerado que depende de otras personas para poder llevar una vida lo más normal posible, ya que no tiene movilidad en ninguna parte de su cuerpo (excepto la cabeza). 

 "Intocable no se centra en lo que no puede hacer 
una persona tetrapléjica, sino en todo lo que sí puede seguir realizando y en cómo puede disfrutar 
de esa vida de limitaciones"

Si leemos hasta ahí parece una tragedia más que una comedia. Pero la película no se centra en lo que no puede hacer una persona con este problema, sino en todo lo que sí puede seguir realizando y en cómo puede disfrutar de esa vida de limitaciones. Y ahí entra el otro personaje, el de Driss, un joven de color procedente de los suburbios de París que acaba de salir de prisión. Él es el elegido por el protagonista para encargarse de cuidarlo día y noche, algo que extraña a todas las personas que le rodean ya que las diferencias sociales y culturales entre ellos parecen, a priori, insalvables, pero es precisamente esta incompatibilidad aparente entre sus formas de vida, lo que atrae al acaudalado aristócrata, que ve en este alocado chico a alguien que no le tratará con lástima ni como a un inválido, sino como a una persona a la que le queda mucho por vivir y experimentar, sin barreras ni limitaciones físicas ni psíquicas. 


"La película nos inyecta una elevada 
dosis de optimismo"


Y esta relación entre los dos personajes resulta de lo más divertida y cómica gracias a un estupendo guión, pero especialmente, al buen hacer de ambos actores, que cada uno a su manera, hacen que el film se convierta en un sinfín de toques deliciosos de humor, dando una lección de optimismo frente a las adversidades y regalándonos una carcajada tras otra a los espectadores. En definitiva... una exquisitez de película, de estas que te dejan un buen sabor de boca; y sobre todo (y muy importante en estos tiempos), nos inyecta una elevada dosis de positivismo. 


Me llamó mucho la atención la presencia en la sala de diversas personas en silla de ruedas

Creo que ya he alabado lo suficiente a esta película. Pero la realidad es que lo merecía. Y dicho esto, solo me queda decir que, por favor, no os la perdáis. 

¡Hasta la próxima, estanteros!






jueves, 1 de marzo de 2012

ABRAZANDO LA PRIMAVERA... ¡Hagamos planes!

No sé si es porque hoy empieza marzo y ya estamos abrazando la primavera, por los rayos de sol que cubren toda la ciudad de Valencia en esta época o qué sé yo... pero hoy me he levantado especialmente feliz.

¿Y de qué voy a hablar en un día como éste? Pues como hoy estoy especialmente mística y en los tiempos que corren no estamos para rascarnos el bolsillo (entre otras cosas porque no hay donde rascar, valga la redundancia) expondré una serie de actividades que se pueden hacer en mi ciudad (y que cada uno lo extrapole al lugar donde habite) durante estos días de ensueño primaveral de manera muy económica:

-Pasear por el cauce del río Turia, ya sea caminando, en bici, corriendo o patinando. Es placentero, agradable y, para los más vagos, cada ciertos metros, tenéis un barecito donde parar y tomar una cervecita y unas bravas. Sensacional a más no poder.

-Darse una vuelta por el barrio de Ruzafa. Es histórico, bonito, lleno de locales interesantes para tomar algo, ver arte o simplemente sentarse y disfrutar de la vida. Además, ahora que comienzan las Fallas, tiene un color especial (y que me perdonen los sevillanos porque les he copiado su tradicional frase para hablar de su city), con sus muchas Fallas e iluminación.

-Como bien he mencionado, ya estamos en Fallas. Y toca sentarse o quedarse de pie degustando los tradicionales bunyols con chocolate. (Ya se que he dicho que serían propuestas económicas pero hay puestos como 'El contraste' en Ruzafa o 'Santa Catalina' en pleno centro de Valencia cuya calidad-precio nos deja contentos, aparte de que habrá que llenar los estómagos, ¿no?).

-Salir un poco del bullicio de la ciudad y caminar por la playa del Saler. Es tranquila, salvaje y está cerca de L'Albufera, a la que también podemos acercarnos a dar una deliciosa travesía en barca. ¿Qué más se puede pedir?

-Paellita en la playa de La Malvarrosa es algo que se puede hacer sin recibir sablazos a nuestra economía. Ejemplo de ello es el restaurante LA ALEGRÍA DE LA HUERTA, donde están ricas, sabrosas y, lo mejor de todo, gozas de la vista del mar en primera línea. 

-Pero no todo iba a ir de comer. También se puede, en estos días de sol, aprovechar para recorrer todo el Parque de Viveros (el pequeño Parque del Retiro para los valencianos), y disfrutar de un estupendo libro tirados en el césped o de unos buenos pases de balón en un 'pseudo partido' de fútbol con amiguetes o familiares.

Pues os dejo aquí mis seis propuestas, que evidentemente están bastante alejadas del bullicioso ambiente fallero que se avecina en mi ciudad. Pero creo que estos planes son perfectamente compatibles para los que necesitemos un poquito de relax en medio de la fascinante y marchosa fiesta valenciana que son las Fallas.

¡Hasta la próxima ESTANTERÍA!


Imagen tomada en el cauce del río Turia, frente a la Ciudad 
de las Artes y las Ciencias de Valencia