CINE CLÁSICO: I LOVE YOU

Ayer llovió a cántaros y de repente me di cuenta de que en breve llegará el crudo invierno y me empezarán a entrar ganas de quedarme en casa sin salir y ver películas clásicas tapada con una manta en el sofá. ¿Acaso hay algo mejor?

Por eso, he dado un repaso al cine clásico que habita en mi susodicha ESTANTERÍA. Y hay muchos films antiguos de estos que nunca dejan de gustarnos por mucho que los veamos de año en año. 

Así que... allá va mi lista de pelis clásicas. Detrás de cada una pondré simplemente su director ya que detallando también los actores puede llegar a ser soporífero -teniendo en cuenta que es domingo, que hace un sol espléndido, y que deberíamos estar todos en la playa o en el campo-. 

El séptimo arte clásico que vive en MI ESTANTERÍA es el siguiente (por orden alfabético): 

-Atrapa a un ladrón, de Alfred Hitchcock.

-Casablanca, de Michael Curtiz.

-Charada, de Stanley Donen.

-Con faldas y a lo loco, de Billy Wilder.

-Con la muerte en los talones, de Alfred Hitchcock.

-Desayuno con diamantes, de Blake Edwards.

-El crepúsculo de los dioses, de Billy Wilder.

-El golpe, de George Roy Hill.

-La gata sobre el tejado de zinc, de Richard Brooks.

-La gran evasión, de John Sturges.

-La soga, Alfred Hitchcock.

-La ventana indiscreta, Alfred Hitchcock.

-Lo que el viento se llevó, de Victor Fleming.

-Matar a un ruiseñor, de Robert Mulligan.

-Sabrina, de de Billy Wilder.

-Serenta nostálgica, de George Stevens.

-Sissí (Edición de Oro). Con las tres películas sobre Sissí y otras tres películas sobre Romy Schneider en aquella época. Son películas que me han gustado desde bien pequeña. A estas alturas ya sabréis que soy una cursi. 

-Testigo de cargo, de Billy Wilder.

-Vacaciones en Roma, de William Wyler. 

-Vivir para gozar, de George Cukor. 

Más adelante iré escribiendo posts sobre una película clásica en concreto porque, aunque son films que han sido comentados una y otra vez por generaciones y generaciones, se merecen volver a ser nombrados; y de esa manera, no dejarlos jamás en el olvido. 

Y para finalizar, os dejo con el final de CON FALDAS Y A LO LOCO, uno de mis clásicos preferidos junto a Lo que el viento se llevó.